Apple y Google han pisado el acelerador para integrar sus teléfonos inteligentes con los sistemas de comunicación de los autos. Las grandes automotrices, sin embargo, insisten en que la pantalla del tablero de instrumentos les pertenece y que el único rol que las empresas tecnológicas pueden desempeñar es el de proveedores de aplicaciones. Una razón por la cual los fabricantes son reacios a permitir que Apple y Google incursionen en…